Anomia:
evaluación, diagnóstico e intervención
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- 26 mayo, 2014
- Andrés Sardinero Peña
Categorías: Evaluación y
Diagnóstico, Neuropsicología, Rehabilitación y
Terapias
Diagnóstico, Neuropsicología, Rehabilitación y
Terapias
Foto original: speak no evil
por emiliokuffer
licencia BY CC 2.0
por emiliokuffer
licencia BY CC 2.0
En esta entrada comentaremos
las distintas formas de anomia, su evaluación y rehabilitación desde el marco
de la neuropsicología cognitiva y más en particular a partir de la obra
de Fernado Cuetos –
Vega.
las distintas formas de anomia, su evaluación y rehabilitación desde el marco
de la neuropsicología cognitiva y más en particular a partir de la obra
de Fernado Cuetos –
Vega.
El síntoma más
característico de las afasias es la anomia. La anomia puede entenderse como una
dificultad para encontrar las palabras previamente conocidas y utilizadas
por el paciente. Esa dificultad puede ser desde muy ligera a severamente
incapacitante. En todo caso nos referimos a personas que ven reducido su
vocabulario a consecuencia de una alteración neurológica, daño cerebral o
enfermedad que repercute en el funcionamiento del sistema nervioso central.
característico de las afasias es la anomia. La anomia puede entenderse como una
dificultad para encontrar las palabras previamente conocidas y utilizadas
por el paciente. Esa dificultad puede ser desde muy ligera a severamente
incapacitante. En todo caso nos referimos a personas que ven reducido su
vocabulario a consecuencia de una alteración neurológica, daño cerebral o
enfermedad que repercute en el funcionamiento del sistema nervioso central.
Pero más apropiado que
hablar de “anomia” en singular sería emplear el término “anomias” en plural.
Existen diferencias cualitativas entre las manifestaciones de la anomia y,
cuando menos, podríamos hablar de tres formas de anomia. ¿Por qué tres
formas de anomia? Aquí entra en juego un modelo teórico explicativo que
podríamos considerar de gran valor heurístico en la clínica ya que ayuda al
profesional a comprender, evaluar y diagnosticar los errores en el acceso al
vocabulario.
hablar de “anomia” en singular sería emplear el término “anomias” en plural.
Existen diferencias cualitativas entre las manifestaciones de la anomia y,
cuando menos, podríamos hablar de tres formas de anomia. ¿Por qué tres
formas de anomia? Aquí entra en juego un modelo teórico explicativo que
podríamos considerar de gran valor heurístico en la clínica ya que ayuda al
profesional a comprender, evaluar y diagnosticar los errores en el acceso al
vocabulario.
Este modelo postula la
existencia de tres procesos cognitivos en la producción de palabras para
los que existe cierto consenso en la comunidad científica:
existencia de tres procesos cognitivos en la producción de palabras para
los que existe cierto consenso en la comunidad científica:
1. El sistema semántico:
opera “preparando el significado que se pretende producir.”
opera “preparando el significado que se pretende producir.”
2. El léxico fonológico:
se encarga de “recuperar la palabra que mejor expresa ese significado.”
se encarga de “recuperar la palabra que mejor expresa ese significado.”
3. El almacén de fonemas:
activa “cada uno de los fonemas que componen la palabra.”
activa “cada uno de los fonemas que componen la palabra.”
Por ejemplo, supongamos que
nos presentan la fotografía de un canario enjaulado para que digamos cómo se
llama. En primer lugar accederíamos a algunos conocimientos al respecto (ej.:
es un pájaro, es pequeño y de colores vivos, canta, puede ser un animal de
compañía, etc.) En segundo lugar, generaríamos mentalmente varias etiquetas
candidatas que entrarían en competición hasta dar con la más adecuada (ej.:
periquito, jilguero, loro… ¡canario!). Por último, sería necesario seleccionar
los sonidos que componen la palabra (ej.: /k/, /a/, /n/, /a/, /r/, /i/, /o/).
nos presentan la fotografía de un canario enjaulado para que digamos cómo se
llama. En primer lugar accederíamos a algunos conocimientos al respecto (ej.:
es un pájaro, es pequeño y de colores vivos, canta, puede ser un animal de
compañía, etc.) En segundo lugar, generaríamos mentalmente varias etiquetas
candidatas que entrarían en competición hasta dar con la más adecuada (ej.:
periquito, jilguero, loro… ¡canario!). Por último, sería necesario seleccionar
los sonidos que componen la palabra (ej.: /k/, /a/, /n/, /a/, /r/, /i/, /o/).
En correspondencia, hablamos
de anomia semántica cuando falla el proceso de activación de los
conceptos y representaciones de significado de los objetos. Las personas con
anomia semántica han perdido parte de su conocimiento y memoria, siendo
incapaces de acceder a las representaciones conceptuales. Por eso, tienen
dificultades tanto al emitir las palabras como al comprender el significado de
los objetos y palabras que se les presentan. Llevado a la quintaesencia, el
anómico semántico tiene dificultades con el ¿qué es esto?
de anomia semántica cuando falla el proceso de activación de los
conceptos y representaciones de significado de los objetos. Las personas con
anomia semántica han perdido parte de su conocimiento y memoria, siendo
incapaces de acceder a las representaciones conceptuales. Por eso, tienen
dificultades tanto al emitir las palabras como al comprender el significado de
los objetos y palabras que se les presentan. Llevado a la quintaesencia, el
anómico semántico tiene dificultades con el ¿qué es esto?
Hablamos de anomia pura o
anomia léxica cuando falla el proceso de acceder a la palabra adecuada. En
esos casos, el paciente sabe lo que quiere decir, comprende el significado del
concepto que pretende transmitir, pero no consigue recordar su nombre. La
experiencia subjetiva es similar a la situación acostumbrada de tener algo en
la punta de la lengua. El anómico léxico tiene dificultades con el ¿cómo se
llama?
anomia léxica cuando falla el proceso de acceder a la palabra adecuada. En
esos casos, el paciente sabe lo que quiere decir, comprende el significado del
concepto que pretende transmitir, pero no consigue recordar su nombre. La
experiencia subjetiva es similar a la situación acostumbrada de tener algo en
la punta de la lengua. El anómico léxico tiene dificultades con el ¿cómo se
llama?
Hablamos de anomia
fonológica cuando existen dificultades en la recuperación de los sonidos
constitutivos de la palabra. El paciente con anomia fonológica sabe qué es lo
que tiene delante, sabe cómo se llama y recupera bien la etiqueta que le
pertenece, pero tiene problemas a la hora de seleccionar los sonidos que
conforman las palabras produciendo errores de sustitución, omisión y/o adición
de sonidos. El anómico fonológico experimenta problemas con ¿qué sonidos
componen la palabra?
fonológica cuando existen dificultades en la recuperación de los sonidos
constitutivos de la palabra. El paciente con anomia fonológica sabe qué es lo
que tiene delante, sabe cómo se llama y recupera bien la etiqueta que le
pertenece, pero tiene problemas a la hora de seleccionar los sonidos que
conforman las palabras produciendo errores de sustitución, omisión y/o adición
de sonidos. El anómico fonológico experimenta problemas con ¿qué sonidos
componen la palabra?
¿Cómo
identificar cada tipo de anomia?
identificar cada tipo de anomia?
Para diseñar un programa de
terapia que se ajuste mejor a las necesidades del caso que se trata, tiene
sentido que el terapeuta invierta tiempo en la evaluación neuropsicológica.
Para la evaluación y diagnóstico puede contar con tres índices diferenciadores
de las anomias:
terapia que se ajuste mejor a las necesidades del caso que se trata, tiene
sentido que el terapeuta invierta tiempo en la evaluación neuropsicológica.
Para la evaluación y diagnóstico puede contar con tres índices diferenciadores
de las anomias:
- La ejecución de los pacientes en las
tareas de distinta naturaleza lingüística. - Las variables y características de los
estímulos ante los que aciertan y ante los que fallan. - Los tipos de errores que cometen en la
producción de palabras.
Veamos los índices uno
a uno.
a uno.
La ejecución
en las tareas.
en las tareas.
Cada tipo de anómico tendrá
un rendimiento inferior más prominente en unas tareas que en otras. Esto no
quiere decir que exclusivamente rindan bajo con unos test y no con otros. Ojalá
fuese tan sencillo, pues lo más habitual en terapia es encontrarse con
cuadros neuropsicológicos con alteraciones múltiples. De ahí surge la necesidad
de integrar la información proveniente de distintas fuentes.
un rendimiento inferior más prominente en unas tareas que en otras. Esto no
quiere decir que exclusivamente rindan bajo con unos test y no con otros. Ojalá
fuese tan sencillo, pues lo más habitual en terapia es encontrarse con
cuadros neuropsicológicos con alteraciones múltiples. De ahí surge la necesidad
de integrar la información proveniente de distintas fuentes.
Partamos de la base de que todos
los anómicos, por lógica, tendrán problemas en las pruebas de denominación,
de entre las que destacamos las pruebas de denominación por confrontación
visual como el Test de Vocabulario de Boston.
los anómicos, por lógica, tendrán problemas en las pruebas de denominación,
de entre las que destacamos las pruebas de denominación por confrontación
visual como el Test de Vocabulario de Boston.
Para la identificación de la
anomia semántica se emplean tareas que demandan acceder al significado
de los objetos. Es importante resaltar que hay que evaluar tanto la capacidad
de producir palabras (cuando el paciente desempeña el papel de emisor) como la
capacidad de comprender palabras (cuando el paciente desempeña el papel de
receptor). Las tareas son:
anomia semántica se emplean tareas que demandan acceder al significado
de los objetos. Es importante resaltar que hay que evaluar tanto la capacidad
de producir palabras (cuando el paciente desempeña el papel de emisor) como la
capacidad de comprender palabras (cuando el paciente desempeña el papel de
receptor). Las tareas son:
- Tareas de clasificación semántica:
consistentes en ordenar palabras y/o dibujos en grupos de significado. - Tareas de asociación semántica: como el Pyramids
and Palm Trees Test en que el sujeto tiene que observar y buscar la
relación entre parejas de conceptos que comparten rasgos, se utilizan
juntos, aparecen en el mismo contexto de la vida real, etc. Por ejemplo,
si el dibujo reactivo fuese un bosque y las opciones de respuesta el
dibujo de un pastel y el dibujo de un mueble, la asociación esperada sería
bosque – mueble. - Tareas de juicios de sinonimia: en las
que el sujeto debe decidir si dos palabras propuestas expresan o no un
mismo significado. - Tareas de emparejamiento palabra –
dibujo: tan sencillas como emparejar palabras escritas o habladas con las
imágenes adecuadas.
Para la identificación de la
anomia léxica o anomia pura serán determinantes los resultados en
los test de denominación por confrontación visual. El terapeuta razonará aquí
por descarte, ya que el anómico puro completa mal la tarea que es problemática
para los tres tipos de anomia (ej.: test de vocabulario de Boston), pero rendirá
razonablemente bien en las pruebas que son sensibles a los otros dos tipos de
anomia (ej.: tareas semánticas para la anomia semántica y tareas de repetición
para la anomia fonológica).
anomia léxica o anomia pura serán determinantes los resultados en
los test de denominación por confrontación visual. El terapeuta razonará aquí
por descarte, ya que el anómico puro completa mal la tarea que es problemática
para los tres tipos de anomia (ej.: test de vocabulario de Boston), pero rendirá
razonablemente bien en las pruebas que son sensibles a los otros dos tipos de
anomia (ej.: tareas semánticas para la anomia semántica y tareas de repetición
para la anomia fonológica).
Para la identificación de la
anomia fonológica se aplican actividades en las que se demanda la
recuperación y pronunciación de fonemas. Hablamos de la repetición de sonidos,
sílabas, palabras y frases pronunciados por el evaluador así como de la lectura
en voz alta de diferentes textos.
anomia fonológica se aplican actividades en las que se demanda la
recuperación y pronunciación de fonemas. Hablamos de la repetición de sonidos,
sílabas, palabras y frases pronunciados por el evaluador así como de la lectura
en voz alta de diferentes textos.
Las
características de los estímulos.
características de los estímulos.
Existen variables de los
estímulos que se emplean en las pruebas que al estudiarlas con detenimiento
ayudan a reconocer el tipo de anomia que padece el sujeto. Los rasgos de los
estímulos pueden repercutir en la precisión y en los errores que
cometen, pero muy importante, también en la velocidad con que se emiten
las respuestas. Los pacientes afásicos y los pacientes neurológicos en general
rara vez experimentan una destrucción completa de cierto proceso cognitivo,
sino que los daños en el sistema suelen ser parciales y suelen repercutir en la
eficiencia de las operaciones, lo cual se traduce en un enlentecimiento del
procesamiento de la información.
estímulos que se emplean en las pruebas que al estudiarlas con detenimiento
ayudan a reconocer el tipo de anomia que padece el sujeto. Los rasgos de los
estímulos pueden repercutir en la precisión y en los errores que
cometen, pero muy importante, también en la velocidad con que se emiten
las respuestas. Los pacientes afásicos y los pacientes neurológicos en general
rara vez experimentan una destrucción completa de cierto proceso cognitivo,
sino que los daños en el sistema suelen ser parciales y suelen repercutir en la
eficiencia de las operaciones, lo cual se traduce en un enlentecimiento del
procesamiento de la información.
Para los proceso
semánticos, la imaginabilidad es una variable fundamental. La
imaginabilidad es el grado en que un concepto se puede visualizar mentalmente
con facilidad o, por el contrario, apenas puede describirse en imágenes de un
modo preciso y compartido por los hablantes de una lengua. Por ejemplo, el
concepto “silla” es muy imaginable. Uno puede ver con el ojo de la mente la
configuración espacial de su partes componentes. Pero una idea abstracta como
“lealtad” no posee rasgos perceptibles que se hayan aprehendido a través de los
sentidos, y es probable que se defina mejor por su relación con otros conceptos.
Los pacientes con anomia semántica experimentarán mayores errores y mayor
enlentecimiento con las palabras poco imaginables.
semánticos, la imaginabilidad es una variable fundamental. La
imaginabilidad es el grado en que un concepto se puede visualizar mentalmente
con facilidad o, por el contrario, apenas puede describirse en imágenes de un
modo preciso y compartido por los hablantes de una lengua. Por ejemplo, el
concepto “silla” es muy imaginable. Uno puede ver con el ojo de la mente la
configuración espacial de su partes componentes. Pero una idea abstracta como
“lealtad” no posee rasgos perceptibles que se hayan aprehendido a través de los
sentidos, y es probable que se defina mejor por su relación con otros conceptos.
Los pacientes con anomia semántica experimentarán mayores errores y mayor
enlentecimiento con las palabras poco imaginables.
Para los procesos léxicos,
las variables fundamentales serían la frecuencia de uso y la edad de
adquisición. La frecuencia de uso, como su nombre indica, es la asiduidad con
que las palabras se emplean en la vida cotidiana. Hay palabras con las que nos
encontramos a menudo al hablar y al leer (ej.: “casa”) y otras que aparecen en
menos ocasiones (ej.: “astrofísico”). La edad de adquisición se refiere al
momento de la vida en que se aprenden. Hay palabras que aprendemos en los
primeros años de vida (ej.: “agua”) y otras que adquirimos más tarde, cuando
disponemos de los recursos cognitivos necesarios para comprender su significado
(ej.: “autopista”). El paciente con anomia léxica será más propenso al error
ante las palabras poco frecuentes y con las palabras que haya adquirido más
tarde.
las variables fundamentales serían la frecuencia de uso y la edad de
adquisición. La frecuencia de uso, como su nombre indica, es la asiduidad con
que las palabras se emplean en la vida cotidiana. Hay palabras con las que nos
encontramos a menudo al hablar y al leer (ej.: “casa”) y otras que aparecen en
menos ocasiones (ej.: “astrofísico”). La edad de adquisición se refiere al
momento de la vida en que se aprenden. Hay palabras que aprendemos en los
primeros años de vida (ej.: “agua”) y otras que adquirimos más tarde, cuando
disponemos de los recursos cognitivos necesarios para comprender su significado
(ej.: “autopista”). El paciente con anomia léxica será más propenso al error
ante las palabras poco frecuentes y con las palabras que haya adquirido más
tarde.
En cuanto a los procesos
fonológicos, la longitud de la palabra y la complejidad articulatoria serán
las variables de interés. La longitud de la palabra consiste en el número de
fonemas y sílabas que la componen. La complejidad articulatoria se refiere a
que existen palabras cuyos sonidos y sílabas componentes se pueden combinar más
fácilmente (ej.:”emperador”) que otras (ej.: “transcribir”).
fonológicos, la longitud de la palabra y la complejidad articulatoria serán
las variables de interés. La longitud de la palabra consiste en el número de
fonemas y sílabas que la componen. La complejidad articulatoria se refiere a
que existen palabras cuyos sonidos y sílabas componentes se pueden combinar más
fácilmente (ej.:”emperador”) que otras (ej.: “transcribir”).
Los errores
que cometen.
que cometen.
Primero, vamos a enumerar
las nueve formas de error anómico más importantes. Luego relacionaremos cada
error con el proceso cognitivo que se presupone dañado.
las nueve formas de error anómico más importantes. Luego relacionaremos cada
error con el proceso cognitivo que se presupone dañado.
1. Error semántico (o parafasia semántica):
consiste en utilizar la etiqueta verbal de un concepto que se relaciona por su
significado con aquel que realmente se pretende transmitir. Por ejemplo, si el
paciente dice “perro” cuando se le muestra un caballo está cometiendo un error
semántico. A veces el error se produce articulando una palabra que describe el
nivel jerárquico superior. En el ejemplo anterior consistiría en decir “animal”
en lugar de “caballo”.
consiste en utilizar la etiqueta verbal de un concepto que se relaciona por su
significado con aquel que realmente se pretende transmitir. Por ejemplo, si el
paciente dice “perro” cuando se le muestra un caballo está cometiendo un error
semántico. A veces el error se produce articulando una palabra que describe el
nivel jerárquico superior. En el ejemplo anterior consistiría en decir “animal”
en lugar de “caballo”.
2. Error fonológico (o parafasia literal):
consiste en la omisión de sonidos, en su sustitución o en el intercambio de sus
posiciones dentro de la palabra. En el ejemplo, consistiría en decir “capallo”.
consiste en la omisión de sonidos, en su sustitución o en el intercambio de sus
posiciones dentro de la palabra. En el ejemplo, consistiría en decir “capallo”.
3. Neologismo: cuando la magnitud de los
errores fonológicos hace incomprensible al oyente lo que el paciente articula
hablamos de un neologismo. Siguiendo con el ejemplo, consistiría en pronunciar
algo como “ayago”.
errores fonológicos hace incomprensible al oyente lo que el paciente articula
hablamos de un neologismo. Siguiendo con el ejemplo, consistiría en pronunciar
algo como “ayago”.
4. Error mixto: consiste en articular una
palabra que, por su afinidad con la pretendida, podría considerarse tanto una
deformación fonológica como semántica. Si un paciente dice “loro” ante el
dibujo de un “toro” estaríamos ante un error mixto.
palabra que, por su afinidad con la pretendida, podría considerarse tanto una
deformación fonológica como semántica. Si un paciente dice “loro” ante el
dibujo de un “toro” estaríamos ante un error mixto.
5. Circunloquio: son errores muy comunes
entre los pacientes afásicos que quizá podríamos considerar como una estrategia
de compensación que desarrollan para mantener abierta la comunicación y hacer
llegar el mensaje que desean. No es nada extraño que, ante la imagen de un
concepto cuya etiqueta verbal han olvidado, den una descripción de sus rasgos o
de su uso. Por ejemplo, un circunloquio consistiría en decir “para hacer la
comida” ante la imagen de una sartén.
entre los pacientes afásicos que quizá podríamos considerar como una estrategia
de compensación que desarrollan para mantener abierta la comunicación y hacer
llegar el mensaje que desean. No es nada extraño que, ante la imagen de un
concepto cuya etiqueta verbal han olvidado, den una descripción de sus rasgos o
de su uso. Por ejemplo, un circunloquio consistiría en decir “para hacer la
comida” ante la imagen de una sartén.
6. Error morfológico: cuando se emplean palabras
derivadas o que comparten una misma raíz. Un ejemplo consistiría en decir
“zapato” ante la imagen de una zapatería.
derivadas o que comparten una misma raíz. Un ejemplo consistiría en decir
“zapato” ante la imagen de una zapatería.
7. Error perseverativo: cuya naturaleza estriba en
repetir una palabra recientemente utilizada, hace pocos segundos o minutos. Se
pronuncia con independencia de que pueda guardar o no relación semántica o
relación fonológica con el nombre de la imagen que se presenta en ese instante.
repetir una palabra recientemente utilizada, hace pocos segundos o minutos. Se
pronuncia con independencia de que pueda guardar o no relación semántica o
relación fonológica con el nombre de la imagen que se presenta en ese instante.
8. Respuesta no relacionada: cuando el paciente utiliza
una etiqueta arbitraria que, sin que el terapeuta sepa bien cómo ni por qué, ha
asociado con el objeto que tiene delante. Este error tiende a causar cierto
desconcierto en el oyente. Por ejemplo, si dice “partitura” ante la imagen de
un caballo no podemos atribuir inicialmente que exista relación semántica o
fonológica.
una etiqueta arbitraria que, sin que el terapeuta sepa bien cómo ni por qué, ha
asociado con el objeto que tiene delante. Este error tiende a causar cierto
desconcierto en el oyente. Por ejemplo, si dice “partitura” ante la imagen de
un caballo no podemos atribuir inicialmente que exista relación semántica o
fonológica.
9. No respuesta: cuando la persona decide
no emitir ningún sonido o declara que no sabe el nombre del objeto.
no emitir ningún sonido o declara que no sabe el nombre del objeto.
Como adelantábamos, cada
error es más característico de la alteración de cierto proceso cognitivo que de
otro. En la siguiente tabla se expone de manera sucinta la relación entre los
errores y los procesos alterados:
error es más característico de la alteración de cierto proceso cognitivo que de
otro. En la siguiente tabla se expone de manera sucinta la relación entre los
errores y los procesos alterados:
Procesos semánticos |
Procesos léxicos – fonológios |
Almacén de fonemas |
Errores semánticos |
Errores semánticos |
- |
- |
Errores fonológicos |
Errores fonológicos |
- |
Circunloquios |
- |
- |
Errores morfológicos |
- |
- |
Perseveraciones |
- |
No respuestas |
No respuestas |
- |
Respuestas no relacionadas |
- |
- |
Integrando los
datos.
datos.
En la siguiente figura se
resume lo expuesto hasta este momento, enumerando los procesos cognitivos
implicados en la denominación, los tipos de anomia a cuya afectación dan lugar,
las tareas más importantes para evaluar cada proceso, las variables de los
estímulos que repercuten en la ejecución y los errores más característicos:
resume lo expuesto hasta este momento, enumerando los procesos cognitivos
implicados en la denominación, los tipos de anomia a cuya afectación dan lugar,
las tareas más importantes para evaluar cada proceso, las variables de los
estímulos que repercuten en la ejecución y los errores más característicos:
La
intervención para cada tipo de anomia.
Cuetos-Vega recomiendaintervención para cada tipo de anomia.
ciertas actividades para cada tipo de anomia que se resumen aquí y que
ampliamos con otras provenientes de nuestra experiencia clínica:
Recomendados
para la rehabilitación:
Cuadernos de
estimulación del lenguaje de la Colección de Talleres Cognitiva.
Terapia presencial individual para el tratamiento de la
afasia.
Video de
pacientes con afasia.
El siguiente video titulado
“Mi cabeza está roto” recoge el emotivo testimonio en primera persona de
pacientes con afasia.
Fuente del video: http://noticias.lainformacion.com/ciencia-y-tecnologia/ciencias-general/mi-cabeza-esta-roto_rFGeS9JUVzAJgPh22h0G47/
Obras
recomendadas.
Cuetos Vega, F. (2003). Anomia:
la dificultad para recordar las palabras. Madrid: TEA Ediciones. Es la
obra que hemos seguido para la elaboración de este post y cuya lectura
consideramos de gran interés para cualquier profesional que trabaje con
pacientes afásicos.
- Fernández-Blázquez MA, Ruiz-Sánchez de
León JM , López-Pina JA, Llanero-Luque M, Montenegro M, Montejo P. Nueva
versión reducida del test de denominación de Boston para mayores de 65
años: aproximación desde la teoría de respuesta al ítem. Rev Neurol
2012;55 (07):399-407 Adaptación del test de denominación Boston
mediante la teoría de la respuesta al ítem para su uso como test de
screening de la afasia en personas mayores de 65 años. De especial
utilidad en el ámbito del diagnóstico de las demencias.
Tags: afasia, alteración cognitiva,
anomia, estimulación
cognitiva, evaluación
neuropsicológica, rehabilitación
cognitiva, terapia afasia
Anomia: evaluación, diagnóstico e intervención | Rehabilita Memoria
Blog dedicado a la Esclerosis Múltiples desde el punto de Vista de una paciente que busca información y solución a su enfermedad. Carolina Bertolo
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Gracias por dedicarme un poco de atención y a preocuparte por este tema.